Ryuü y Mei son dos huskies, macho de 5 años y hembra de 4. Son dos perros miedosos que se asustan por ruidos en general, camiones, niños… El macho presenta cierta reactividad a perros y tiene ciertos problemas intestinales.
La actitud de los responsables de los perros siempre es importante de cara a solucionar un problema de comportamiento canino. En este caso la actitud era inmejorable y estaban dispuestas a aprender y hacer lo que sea por mejorar la vida de los perros. Más allá de las molestias que generaban a su día a día la conducta de sus perros, se daban cuenta de que los huskies lo pasaban mal.
Como siempre el primer trabajo es identificar estresores. ¿Qué puede estresar a un perro? Pues un tono de voz alta, un lenguaje corporal agresivo o brusco, jugar a la pelota, castigos, toques, correcciones físicas, paseos inadecuados, manejo de correa…etc.
Con el tema d los miedos debemos ir proponiendo retos a nuestro perro para que se atreva a hacerlo. A veces, el pasar por encima de una escoba colocada a modo de valla pocos centímetros encima del suelo puede ser todo un reto. En la medida que el perro sea capaz de ir superando pequeños ratos, irá ganando seguridad y confianza para llevar mejor cosas que le asustan, como en este caso los camiones o coches.
Pocas semanas después de empezar a trabajar con los perros, éstos estaban mucho más tranquilos y no estaban tan asustadizos.