Hura es una mestiza de 1 año y cuatro meses, que presenta diversos miedos que se manifiestan en distintos comportamientos: tira de la correa, se presenta intensa y gruñendo a perros, se asusta con la televisión, con la escoba, el teléfono….
Antes de que vaya a más sus responsables han querido trabajar estos temas y mejorar tanto la vida de Hura como la convivencia
Uno de los principales problemas era el paseo. Hura entraba en modo tirar, y gruñir, y sus responsables no disfrutaban del paseo y no sabían cómo manejar la situación.
Los humanos tendemos a querer controlar a nuestro perro durante los paseos. Dicho control puede hacer que poco a poco mi perro vaya más estresado en los paseos, convirtiendo los mismos en un suplicio.
Para mí, nuestra labor en los paseos es supervisar e intentar evitar o minimizar aquellas situaciones que sepamos pueden sobrepasar a mi perro, mientras las vamos trabajando: pasar cerca de bicis o motos, encuentros de frente con perros en sitios estrechos, tirones de correa, parques de perros, reuniones de vecinos con sus perros a la misma hora todos los días, perros estresados que ladran o tienen comportamientos agresivos….
En este caso el uso de una correa larga y el que sus responsables tomaran el paseo desde otro punto de vista (el paseo es para el perro), hizo que Hura poco a poco fuese más tranquila en le paseo.
Por supuesto se hizo una reducción de estrés, para ir minimizando todo aquello del día a día de Hura que la fuese molestando, asustando o excitando demasiado.
Con una serie de ejercicios, Hura fue sintiéndose más segura de si misma, confiada y con mejor autoestima. Resultado: Hura va mucho más tranquila por la vida y sus responsables disfrutan más de la convivencia, y de ver a su perra más feliz.
Gracias a María Eugenia y Verónica por permitir ayudaros y confiar en mí.