Miedo y dependencia
Lennon es un Yorkshire de 6 años que desde hace 6 meses se ha mudado con su responsable a una finca. Allí está la pareja y, un pastor alemán y un labrador, de 8 y 7 años respectivamente.
El problema es que Lennon lleva mal el cambio y ladra casi constantemente. Antes ya ladraba mucho y demandaba atención (era el único perro). Tenía y tiene dependencia respecto a su responsable, y ahora lo está pasando mal. Además la relación con los otros dos perros no es muy buena, y el pastor alemán tiene dolores articulares (postura encorvada, y le cuesta sentarse).
El hecho de la existencia de esos dolores, hace que el pastor alemán sea más susceptible ante la conducta del Yorkshire, con el consiguiente peligro de algún enfrentamiento. Y dado la diferencia de tamaños, eso puede acabar mal
Desgraciadamente en este caso no fui capaz de explicar claramente que iba a ser un proceso que llevaría tiempo. Su responsable quería una respuesta rápida, y eso no es posible en la mayoría de los casos. No hay botones mágicos. Se necesita tiempo, paciencia y dedicación. Hay técnicas que aparentemente son más rápidas (dominancia y castigos), pero que no funcionan a medio plazo y que de hecho traen malas consecuencias.
Cuando hay problemas emocionales, como en este caso el miedo y la dependencia de Lennon, hay que cambiar muchas cosas de su vida para ir reduciendo estrés y que el perro gane en independencia y seguridad. Y esto en la mayoría de los casos lleva tiempo, trabajo, paciencia y dedicación. Sin ello es casi imposible obtener resultados.
Muchas veces nos centramos en el perro que aparentemente está dando más problemas, pero hay que trabajar con todos los perros, ya que si rebajamos el estrés de manera individual, lo hará también a nivel grupal.